Atados de salvia blanca: un elemento que utilizaban los indios americanos
Los atados de salvia blanca han sido omnipresentes en las ceremonias de purificación y curación que los indios nativos de América del Norte celebran desde hace siglos. El sahumerio de esta planta, atada, era tan habitual para iniciar determinados rituales que se podría comparar con el acto lavarse las manos antes de comer, dado el poder limpiador que le otorgan estas tribus.
Hoy, se sabe que estos atados cuentan con unas propiedades para la salud que son muy apreciadas por muchos especialistas en medicina natural, que han visto que disponen de un potencial mucho más amplio que el purificador que le atribuían los más antiguos pobladores de las tribus norteamericanas.
Antes de nada, conviene arrojar un poco de luz sobre la salvia blanca, una planta procedente de la familia de la menta que en estas comunidades indígenas era muy tenida en cuenta por su poder para eliminar las impurezas, tanto en el cuerpo, como en el espíritu.
A esta especie se le han dado diferentes usos a lo largo de la historia, hasta el punto de haber formado parte desde de rituales hasta de recetas de cocina. En su forma infusionada, se ha aplicado tradicionalmente para aliviar los dolores abdominales, determinadas patologías como la gingivitis, el mal aliento o algunos problemas cutáneos.
En la ancestral forma de atado, se presenta de forma seca, de modo que pueda ser sahumada. La fragancia que desprende su humo resulta agradable e intensa; y es utilizada de forma habitual en la aromaterapia debido a la capacidad que posee de incrementar la cantidad de oxígeno que recibe el cerebro.
Esto genera diversos efectos favorables, desde una mayor capacidad de concentración hasta una mayor facilidad de relajación tras haberse enfrentado a situaciones de estrés. También es recomendable para aliviar los síntomas de una de las enfermedades psicológicas más temidas y frecuentes en la actualidad, como es la depresión.
Lejos de basarse en creencias, estas afirmaciones han sido respaldadas por la ciencia, que ha comprobado que, al igual que el de otras hierbas similares, el humo de la salvia blanca modifica la estructura molecular del aire, lo que favorece la mayor oxigenación del cerebro.
Estos atados también se emplean de forma común para purificar las nuevas viviendas y eliminar de ellas la energía negativa. Además, dadas sus propiedades aromáticas, su empleo sólo puede ser considerado como positivo.
La salvia blanca es una de esas plantas que ha sobrevivido al paso de los siglos, hasta llegar a la vida moderna, procedente de nuestros ancestros. Y, cuando algo permanece vivo durante tanto tiempo, es debido a que sus propiedades resultan muy beneficiosas, si se sabe aprovechar su potencial.
En su forma atada, esparce un aire místico que complementa a sus propiedades para templar el ánimo y el carácter, de ahí que se pueda llegar a considerar poco menos que como un pequeño tesoro brindado por la naturaleza.puedes visitar nuestra pagina